‘Tengo miedo, torero’, una película chilena que tienes que ver

La misma noche que la policía irrumpe en un bar underground travesti y mata a una de sus amigas, la Loca del Frente (Alfredo Castro) queda prendada de Carlos (Leonardo Ortizgris), el mexicano que, en la huida, le salva la vida. Así inicia Tengo miedo, torero.

Es Chile, año 1986. La represión política se respira en las calles, pero la Loca prefiere ignorarla, así como la sociedad y cualquier orden político ignora a las personas como ella. Está convencida de que, aunque la dictadura de Pinochet termine, la represión sexual continuaría.

Pero la atracción que siente hacia el misterioso Carlos la llevará a inmiscuirse en asuntos políticos.

No tan ingenuamente morderá el anzuelo que su príncipe misterioso le lanza para que esconda en su paupérrimo departamento unas cajas con libros sobre arte.

La metáfora de los libros como armas cobrará vida ante sus ojos cuando revise el contenido de esas cajas.

El favor que le hace a Carlos se torna aún más peligroso al abrirle las puertas de su casa a los colegas de éste para que celebren ahí reuniones que hieden a clandestinidad.

La Loca entiende lo que está pasando, es consciente del riesgo de vincularse al activismo contra la dictadura, pero está dispuesta a asumirlo porque se ha enamorado de Carlos.

Él la trata con respeto y dulzura, pero, ¿corresponde realmente a su amor o sólo la está utilizando?

El filme dirigido por el chileno Rodrigo Sepúlveda está basado en la novela homónima de su compatriota, el escritor, artista visual y activista Pedro Lemebel (1952-2015).

El tono político de la obra original y, por supuesto, de su autor, impregna toda la adaptación, pero es el íntimo retrato de la relación entre la Loca y Carlos lo que más sobresale en ésta.

Si bien la conveniencia o visión estratégica es lo que motiva al joven revolucionario a acercarse a la Loca, no se cierra a conocerla ni rechaza tajantemente sus coqueteos.

Me encantaron el guion, la fotografía y la música, pero sin duda lo mejor de la película es la actuación de Alfredo Castro, quien le aporta a su personaje infinidad de matices que transmiten a la perfección su marginación y la valentía con la que resiste defendiendo su identidad.

La recomiendo muchísimo, claro está. La pueden encontrar en Amazon Prime Video.

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